Porque el miedo tiene poderosas razones
yo aguardo el milagro
y espero una luz exterior.
Darse de bruces contra el mundo.
Eso es vivir.
Vivir para ser herido una y otra vez.
Y porque he aprendido a esperar,
a ser paciente con el miedo absoluto
que hay en mi ser,
quiero vivir, vivir aunque conozca el peligro.
Y ser como un latido solitario
que regresa en la noche
buscando un corazón que
aún palpite.
De: Cierra el portón
Daniel Noya
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