“La poesía pretende cumplir la tarea de que este mundo no sea sólo habitable para los imbéciles.”

(ALDO PELLEGRINI)

viernes, 31 de agosto de 2018

Gesto para un objeto: Alejandra Pizarnik


























GESTO PARA UN OBJETO

En tiempo dormido, un tiempo como un guante sobre un tambor.

Los tres que en mí contienden nos hemos quedado en el móvil punto fijo y no somos un es ni un estoy.

Antiguamente mis ojos buscaron refugio en las cosas humilladas, desamparadas, pero en amistad con mis ojos he visto, he visto y no aprobé.

Poesía completa
Alejandra Pizarnik

jueves, 30 de agosto de 2018

Contra ti: Juan Cobos Wilkins








Contra ti


Jugar con pieles
rojas
           o dejarte estoicamente arrancar la cabellera.

Encarcelado tras las rayas de un tigre
                                                                              o, dentro de él,
ir deshojándole uno a uno los rugidos como pétalos
comestibles de una rosa en dulce árabe de miel.

Niño o pirata, sombra o reloj,
continuar, marcharse. No querer
escribir y hacerlo,
qué más da.

Esa devastadora indiferencia contigo mismo, el infantil
desdén, tan soberbio arañazo tuyo contra ti, son
fuego. El fuego ardido de los fuegos
fatuos. La llama
muerta, resucitada entre las llamas vivas.
                                                                                        Y sólo
el alfanje del alado guardián del poema
o paraíso es la frontera de tu más destructivo
deseo inalcanzable:
                                         ser
inmortal, y, a la vez, expulsado.

De: "Escritura o paraíso"

Juan Cobos Wilkins

miércoles, 29 de agosto de 2018

Con la ayuda de Hölderlin: Erri De Luca





CON LA AYUDA DE HÖLDERLIN

El mes de mayo del noventa y nueve 

los belgradenses se hacían los astrónomos 
y escrutaban el cielo. 
El suelo explotaba, temblaban las piedras 
más aún que los viejos, los perros o los niños. 
Las bombas de grafito habían cortado la electricidad, 
en la oscuridad la fraternidad aumentaba. 
“Donde existe el peligro, crece 
también aquello que puede salvarnos.” 
(Wo aber Gefahr ist, wächst / das Rettende auch.)
El poeta no estaba en Belgrado aquel mes de mayo, 
estaba muerto desde hacía siglo y medio, 
pero sus páginas sí, se encontraban en mis bolsillos 
como arma antiaérea, como salvoconducto. 
En la guerra las palabras de los poetas protegen la vida 
junto a las plegarias de una madre. 
En una guerra los huérfanos y quienes no tienen un libro 
están al descubierto.

Erri De Luca