SIN QUERER
Sin querer
me salen
versos,
pequeñas alas,
hilos de luz, gotas
de vida que
brillan
en el aire.
Sin querer
recorro el
mapa y tan pronto estoy
en las islas
Salomón
como viajando
a Reggio di
Calabria.
Sin querer se
me abren huecos,
suenan en mí
cítaras,
idilios,
mensajes
cifrados en un escaparate
de O´Connell
Street.
Sin querer me
salen prados,
mimbres,
resplandores,
antiguas fotografías
que me descubren
el sonido de
tu voz
cruzando el
mar Egeo.
Sin querer
me salen
ciervas en el bosque, caballos azules
en los labios,
soplos de tormenta,
pájaros
rozándome la nariz,
polvo entre
las manos.
Sin querer
al abrir la ventana me sale un valle, un brillo,
una mirada sin sombras,
el recuerdo de un oasis en
Ouarzazate,
una mirada que
adivina lo que calla el paisaje.
De: Cien fuegos
Daniel Noya
No hay comentarios:
Publicar un comentario