“La poesía pretende cumplir la tarea de que este mundo no sea sólo habitable para los imbéciles.”

(ALDO PELLEGRINI)

domingo, 31 de mayo de 2020

Desde los márgenes: Daniel Noya




(57)

Desde los márgenes
las últimas trampas de la carne.
Los deseos
se desvanecen,
son fantasmas en la casa de tu noche a oscuras,
son páginas para escribir lentamente el vacío.

Ciega es la luz que no escucha
mi dolor.

Sorda es la luz que no ve 
mi pena.

Pero al atardecer
el olor de la brisa 
que me devuelve al mar,
la herida rejuvenecida
en la piel de la lluvia,
el resplandor 
de las palabras en mi garganta
y un nuevo rayo de luz
en mi sangre,

pero al atardecer
me acariciarán de nuevo
las huellas de las risas 
en la orilla de los charcos,

pero al atardecer las flechas radiantes de la mirada 
arrojadas a un mundo
donde todavía hay sol,

donde todavía hay rocío en las arterias del corazón,

donde todavía palpitan extravíos de infancia,

me salvarán de nuevo del naufragio
de las cenizas.

 De: Cien fuegos

Daniel Noya

sábado, 30 de mayo de 2020

Lenguaje de bidones de barrera: Paul Celan




LENGUAJE DE BIDONES DE BARRERA, canto de bidones de barrera,
la apisonadora zumba
la segunda
Ilíada
en el pavimento
levantado,

orilladas de arena
se miran atónitas las viejas
imágenes, en el arroyo,

oleosos se desangran los guerreros
en charcos de plata, al borde
de la calle, tronitando,

Troya, la coronada de polvo,
ve claro.


De: Compulsión de la luz



Paul Celan

viernes, 29 de mayo de 2020

Hay una hora para esas palabras: Marina Tsvietáieva

























Hay una hora para esas palabras.
Desde la sorda apatía,
sus altos derechos
significan la vida.                                                                                             

Acaso –porque el hombro
oprimido por la frente.
Acaso –porque el rayo
ciego de día.

En una cuerda vana,
la ceniza sobre la sábana.
Un tributo a su miedo
y a sus cenizas.

Tiempo de ardientes desafueros
-y taimados pedigüeños.
Tiempo de hermandades sin tierra.
Tiempo de orfandades sin fronteras.

Berlín, 11 de junio de 1922


De: Antología poética

Marina Tsvietáieva