“La poesía pretende cumplir la tarea de que este mundo no sea sólo habitable para los imbéciles.”

(ALDO PELLEGRINI)

lunes, 30 de noviembre de 2020

Ojos primitivos: Alejandra Pizarnik



OJOS PRIMITIVOS

 

En donde el miedo no cuenta cuentos y poemas, no forma figuras de terror y de gloria.

 

Vacío gris es mi nombre, mi pronombre.

 

Conozco la gama de los miedos y ese comenzar a cantar despacito en el desfiladero que reconduce hacia mi desconocida que soy, mi emigrante de sí.

 

Escribo contra el miedo. Contra el viento con garras que se aloja en mi respiración.

 

Y cuando por la mañana temes encontrarte muerta (y que no haya más imágenes): el silencio de la comprensión, el silencio del mero estar, en esto se van los años, en esto se fue la bella alegría animal.

 

De: El infierno musical

 

Alejandra Pizarnik

domingo, 29 de noviembre de 2020

Mar Menor: Clara Janés

 


MAR MENOR

 

La red de luz

abraza el mecerse lento

de la música toda

en el azul,

para que tu pie baile

la pura ligereza.

No saber;

no saber sino la gravedad que huye.

Y también azul el horizonte de los ojos.

Cuando lloras eres el mar,

cuando ríes eres el agua

y esa luz abarcadora

que no acaba.

 

De: Fractales

 

Clara Janés


viernes, 27 de noviembre de 2020

Ausente: Jorge Riechmann


 













Ausente

 

Hay en tu ser

cámaras apartadas que no alcanzo,

invernaderos de delicia, lenta

germinación en tu sangre y en tu risa.

 

Está bien así. De tu retiro tornas

con la frente encendida y en los ojos

una promesa de luz

total para mañana.

 

De: Cuaderno de Berlín

 

Jorge Riechmann

 

 


jueves, 26 de noviembre de 2020

Las cosas últimas: C. K. Williams

 


LAS COSAS ÚLTIMAS

 

En una cubierta con fijador de secado del estudio fotográfico

            de un amigo

me encontré con una foto de su hijo en el instante posterior

            a su muerte,

aún con las gafas puestas, una gota de sangre saliéndole de la

            boca.

 

Recientemente mi amigo realizó un libro como homenaje a

            su hijo;

casi al final, hay un retrato que le hizo antes de su

            muerte;

el pie de foto dice: “Ésta es la última foto de Alex”.

 

Estoy seguro de que mi amigo no sabe que he visto la otra

            fotografía.

¿Estoy traicionando su confianza al hablar de ello?

Antes de enseñarle esto a alguien, tendré que pedirle

            permiso.

 

Si estás leyendo esto ahora, sabrás que mi amigo me

            perdona,

que ha visto que la pequeña verdad que pueda transmitir su

            historia

reside en el valor de la angustia de recordar ese momento

 

en el que tras cincuenta años de acoger la realidad a través de

            la lente,

no le cabe duda de que la cámara se acercó al ojo por su

            cuenta

y el dedo, seguramente también por su cuenta y riesgo

apretó el obturador.

 

De: Reparación

 

C. K. Williams


miércoles, 25 de noviembre de 2020

Dime: Daniel Noya

 


Dime

 

Dime, si has cortado una flor sin que temblaran tus manos

(Lole y Manuel)

 

Al corazón más oscuro de la noche

llega el grito de dolor

de Saida, llega el grito de dolor de Nasha,

nacida en temporada de lluvias,

el amargo dolor de Zoe

o de Antonella, el dolor de Nyura, llena de gracia.

 

Al corazón más tenebroso de la noche llega el grito de dolor

de las mujeres

a las que arrojaron ácido a la cara.

 

Como a Saida, en Bangladés, que perdió el ojo izquierdo.

 

Y llega el grito de dolor de todas las mujeres mutiladas

por sus padres en la infancia.

 

En las calles de Kenia las niñas tienen miedo.

 

Dime

por qué en México durante la pandemia han sido asesinadas

dos mil mujeres,

por qué hay niñas que son mutiladas en Mali,

que se quedan embarazadas en Nairobi,

por qué a las mujeres nepalíes se las aparta de sus chozas

cuando tienen la menstruación.

 

Dime por qué las consideran impuras.

 

Y por qué

hay mujeres obligadas a casarse con sus violadores

como en Nigeria.

 

Dime

por qué hay en este mundo niñas que reciben peticiones

de matrimonio con once años,

por qué en Mauritania obligan a las adolescentes

a comer para poder casarse,

dime por qué mutilan durante las vacaciones escolares

a las niñas africanas.

 

Al corazón más oscuro de la noche

llega el grito de dolor

de Saida.

 

Cuando salió a la calle la esperaban en la puerta tres hombres.

Uno de ellos era su marido.

Le arrojaron ácido a la cara.

 

Dime si puedes sentir

al ácido atravesar su vestido, llegar hasta la piel,

herir su cuerpo.

 

Dime si puedes escuchar su grito.

 

En las calles de Kenia las niñas tienen miedo.

 

Dime si no te tiembla la voz,

si no te hace llorar tanto dolor.

 

Al corazón más oscuro de la noche llega el grito de dolor

de Chiara,

de Rosa y de Fumiko.

 

El dolor de Eva y de todas las mujeres.

 

 

Daniel Noya

 

 

 

 

 

 

 


martes, 24 de noviembre de 2020

El apañadero: Eloy Terrón

 


Además de la recogida del fruto, los castaños exigían dos labores importantes: primero, mantener el suelo limpio de arbustos y maleza, como escobas, chaguazos, queiruegas, brezos, etc, mediante aradas, por lo menos anuales; y segundo, podarlos en tiempo oportuno para conservar la calidad de las castañas; la leña obtenida de la poda constituía una parte importante de la consumida en el fuego en el hogar. Otra labor, que no todos los campesinos sabían realizar, era la de injertar las plantas jóvenes “bravas” con “púas” de otro árbol que produjera castañas buenas y abundantes. La recogida del fruto requería la limpieza y en suelos pendientes cerrar el “apañadero”, es decir, el suelo sobre el que caían las castañas del árbol.

 

De: Los trabajos y los hombres

La desaparición de la cultura popular en Fabero del Bierzo

 

Eloy Terrón


lunes, 23 de noviembre de 2020

Un aforismo de José Martí

 


“Las manos de los poetas cierran siempre las heridas

que abre la ira de los hombres”

 

De: Aforismos

 

José Martí


domingo, 22 de noviembre de 2020

Perfección: Francisco Pino

 











PERFECCIÓN

 

Esa nube fue y se fue.

¡Qué limpio ha dejado el aire

la pureza de ese ser

que existió para negarse!

 

De: Vuela pluma

 

Francisco Pino


viernes, 20 de noviembre de 2020

Carta de amor: Gonzalo Rojas

 


CARTA DE AMOR

 

Celébrote a máquina sin más laúd

que este áspero

teclado de la A a la Z, dígote cuánto

ámote del tacón

al pelo, esté ese pelo

donde esté, en lo alto o

en lo secreto de tu fragancia, espérote

esperándote parado aquí a

la 7 bajo el humo

del reloj. Y

otra cosa: fíjate en las nubes

pero sin llorar donde está escrito

casi todo

lo blanco y veloz de esta

página dactílica, llámame

por teléfono al

número 00-00-0.

 

De: Materia de testamento

 

Gonzalo Rojas


jueves, 19 de noviembre de 2020

Con una sola caricia: Paul Éluard

 













XVII

 

Con una sola caricia

Te hago brillar con todo tu resplandor.

 

De: Primeramente

 

Paul Éluard


martes, 17 de noviembre de 2020

Me pone triste aún hablar contigo: Eloísa Otero

 













VII

 

Me pone triste aún hablar contigo,

afrontar la realidad con hilos.

Lo evito unas horas,

cuento los días sin llamar,

sin decidirme.

Recuerdo las ganas de acabar

-de desear a medias de camino los términos-

que se me debieron así quedar pegadas.

(Fuera la cosa como fuera dentro de poco quedará

tan poco que decir

que tendremos que acabar

plantándonos).

 

De: Calamita (piedra imán)

 

Eloísa Otero


lunes, 16 de noviembre de 2020

Sí, por detrás de las gentes: Pedro Salinas

 

















Sí, por detrás de las gentes

Te busco.
No en tu nombre, si lo dicen,
no en tu imagen, si la pintan.
Detrás, detrás, más allá.

Por detrás de ti te busco.
No en tu espejo, no en tu letra,
ni en tu alma.
Detrás, más allá.

También detrás, más atrás
de mí te busco. No eres
lo que yo siento de ti.
No eres
lo que me está palpitando
con sangre mía en las venas,
sin ser yo.
Detrás, más allá te busco.

Por encontrarte, dejar
de vivir en ti, en mí,
y en los otros.
Vivir ya detrás de todo,
al otro lado de todo
-por encontrarte-
como si fuese morir.

 

Pedro Salinas


sábado, 14 de noviembre de 2020

La vida en común: Augusto Monterroso

 


La vida en común

 

Alguien que a toda hora se queja con amargura de tener que soportar su cruz (esposo, esposa, padre, madre, abuelo, abuela, tío, tía, hermano, hermana, hijo, hija, padrastro, madrastra, hijastro, hijastra, suegro, suegra, yerno, nuera) es a la vez la cruz del otro, que amargamente se queja de tener que sobrellevar a toda hora la cruz (nuera, yerno, suegra, suegro, hijastra, hijastro, madrastra, padrastro, hija, hijo, hermana, hermano, tía, tío, abuela, abuelo, madre, padre, esposa, esposo) que le ha tocado cargar en la vida, y así, de cada quien según su capacidad y a cada quien según sus necesidades.

 

De: Movimiento perpetuo

 

Augusto Monterroso


viernes, 13 de noviembre de 2020

Si me vengo: Diane di Prima

 















Si me vengo

 

Si me vengo a vivir contigo,

¿me prometerías

un pedazo de carne los domingos,

una hojita de azucena

para olerla en la almohada,

un queso en el refrigerador,

un beso de lengua

entre las pesadillas?

Si no es así,

no me vengo contigo.

 

Diane di Prima

jueves, 12 de noviembre de 2020

Cosmogonía: Javier Vela

 


COSMOGONÍA

 

 

Debió de ser la luz, primeramente,

con su dejo de sombras y contornos,

la palabra que izaste entre tus labios.

 

Después, quizá mi nombre o el

silencio

que cesa al pronunciarlo; cifrarías

mi cuerpo en tu costado lo mismo que una madre…

 

Pero cómo tus labios se infundieron de sangre,

cómo naciste

tú, mujer, mundo, universo,

único dios que creo y conozco

más allá de los símbolos,

y existes.

 

De: Tiempo adentro

 

Javier Vela